UN MÉTODO PELIGROSO (David Cronenberg)

FICHA TÉCNICA

Título original: "A dangerous method"

Dirección: David Cronenberg

Guión: Christopher Hampton

basado en la novela “A most dangerous method” de John Kerr

y la obra de teatro “The talking cure” de Christopher Hampton.

Productor: Jeremy Thomas

Fotografía: Peter Suschitzky

Montaje: Ronald Sanders

Música: Howard Shore

Intérpretes: Keira Knightley, Michael Fassbender, Viggo Mortensen, Vincent Cassel y Sarah Gadon.

Duración: 1h 39 mtos.

SINOPSIS:

Zurich, 1904. El psiquiatra Carl Jung, de 29 años, está empezando su carrera profesional. Ensaya el tratamiento experimental inventado por Freud, el psicoanálisis o "curación por la palabra", con Sabina Spielrein, una joven paciente. Sale a relucir su infancia difícil, repleta de humillaciones sexuales. Freud y Jung se conocen y se hacen amigos. Jung y Sabina, ya curada, también estrechan lazos, llegando a ser amantes. Los dos psiquiatras se distancian. Sabina se convierte también en psiquiatra y pierde interés en Jung. En 1913, Freud está enfermo, Jung tiene una nueva amante y Sabina está casada y embarazada.

C R Í T I C A por Vladimir Eisenstein.

“RAZÓN, ILUMINACIÓN Y PASIONES”

Arrumbado el psicoanálisis, que durante años causó furor intelectual y terapéutico y que incluso nos dejó palabras de uso común, enternece volver a contemplar con la perspectiva del tiempo la hoy ingenua polémica entre freudianos y junguianos gracias a esta nueva película de David Cronenberg, sin duda el director idóneo para abordar este tema. Si la memoria no me engaña son pocas, sorprendentemente, las películas, más en concreto los thrillers psicológicos, con trama psicoanalítica, pese a su gran repercusión social y Hitchcock ha quedado como el director que más lo usó en obras como “Sospecha”.

Christopher Hampton (“Las amistades peligrosas”) firma el guión de “Un método peliroso”, adaptando su propia obra teatral, como Yasmina Reza con Polanski en “Un dios salvaje” y, aunque la comparación sea odiosa, es ilustrativa. Hampton gana con diferencia. Cronenberg a su vez realiza una elegante y soberbia puesta en escena. El estirado comportamiento de los dos doctores, Freud y Jung, muy propio de la época, contrasta brillantemente con el más salvaje de, la primero paciente y luego colega, Sabina Spielrein. El conjunto es una obra redonda en la que se ventilan diversos conflictos que se entremezclan: el del maestro contra el discípulo favorito que acaba rebelándose, maestro pobre además contra discípulo rico y el científico contra el iluminado. En paralelo las intrigas amorosas: la esposa de Jung contra la amante, la represión y el código deontológico contra las pulsiones.

Deliciosa la ambientación y magnífica la interpretación sutil y llena de detalles de Fassbender y, en especial, de Viggo Mortensen. Tengo mis reparos, sin embargo, con Keira Knightley. Afronta, es cierto, el papel más difícil y da el físico, sin duda. Su ferviente mirada es la idónea, pero cuesta creerla, sobre todo en sus momentos iniciales como mujer desequilibrada. Excelente esa mandíbula prognática, pero nos da la sensación de mímica ensayada, más que de gesto que nace del interior. No es obstáculo esto para que la película sea, sin duda, una de las mejores que este año tan paupérrimo tendremos oportunidad de ver.

TRAILER