FICHA TÉCNICA
Título: El imaginario del doctor Parnassus
Título original: The imaginarium of Doctor Parnassus
Dirección: Terry Gilliam
País: Francia, Canadá, Reino Unido
Año: 2009
Fecha de estreno: 23/10/2009
Duración: 122 min.
Género: Aventuras, Intriga, Fantástico
Reparto: Johnny Depp, Heath Ledger, Jude Law, Colin Farrell, Christopher Plummer, Tom Waits, Lily Cole, Verne Troyer, Cassandra Sawtell, Carrie Genzel
Distribuidora: Sony Pictures
Productora: Grosvenor Park Productions, Davis-Films, Infinity Features Entertainment, Parnassus Productions, Poo Poo Pictures
SINOPSIS
El doctor Parnassus (Christopher Plummer) tiene el valioso don de desarrollar la imaginación de otras personas. Ese es el secreto del éxito de su función, que lleva a cabo con la ayuda del sarcástico Percy (Verne Troyer) y el versátil Anton (Andrew Garfield).
Sin embargo, la magia de Parnassus está a punto de volverse en su contra. El doctor lleva años apostando con el diablo, Mr. Nick (Tom Waits) y ha llegado a jugarse la posesión de su hija Valentina (Lily Cole), cuando cumpla 16 años. Ajena a todo ello, Valentina se enamora del forastero Tony (Heath Ledger), mientras su padre busca una solución para no perderla.
by Chiketete
Reencuentro de Terry Gilliam (ex Monty Python) y el malogrado Heath Ledger en esta divertida y entretenida peli de fantasia.Una especie de cuento de hadas,con espejito magico incluido, princesas, enanos y como no... La eterna lucha del bien y del mal. Mejor la imagen y los mundos fantasticos que la historia en si...un pelin larga pa mi gusto, pero esta bien...el amigo Terry y sus mundos delirantes... pa echar el ratico vaya.Curiosidades-tuvieron que terminar la peli sin Ledger tirando de efectos espesiales y de Johnny Depp,Jude Law y Colin Farrell haciendo el papel de Heath al otro lado del imaginario.
Yo decidí ya dar por imposible a Terry Gilliam. Flipa demasiado con sus mundos oníricos y barrocos. Demasiada fantasía delirante. Es un exceso abrumador. Mucho ruido y pocas nueces. Al final es todo fanfarria gesticulante y exagerada. Cuando un humorista se cree un artista y se mete en un ego-trip pierde el contacto con el público. Lástima, porque haciendo el tonto era muy bueno, pero cuando un payaso se da importancia, malo.
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